¿Cuál es la responsabilidad que adquirimos en la compra de una empresa Española?

En muchas ocasiones, puede ocurrir que nos lanzamos a comprar una empresa Española sin tener en cuenta si puede traer consigo algún tipo de consecuencia negativa debido a la responsabilidad que arrastran con ella.

Por ello, ante cualquier compra de empresa Española siempre recomendamos consultarlo antes con un equipo de profesionales, como los que tenemos en Welex, que realicen un estudio previo y puedan ofrecerle la mejor recomendación.

No obstante, en el post de hoy, aclaremos algunos conceptos clave que tenemos que tener en cuenta a la hora de comprar cualquier tipo de empresa en España.

Es importante que quede claro que, si compra una empresa, aunque decida cambiarle el nombre o incluso reorganizarla, no le exime de la responsabilidad que arrastra la empresa adquirida.

Además, también es bueno tener en cuenta que hay que respetar, las previsiones, si es que las hay, y que se establecieron en los estatutos de dicha sociedad. En este caso, los nuevos socios firmantes están en la obligación de cumplir las que se han comprometido en lo pactado con los socios.

En cuestiones laborales, cabe resaltar, que la nueva situación no trae consigo ningún cambio, y no hay obligación de comunicar a los trabajadores dicha situación, aunque sí es recomendable,

Depuración de responsabilidades en la compra de una empresa en España

En primer lugar, aclarar, que tanto el Tribunal de Justicia Europea (TIJUE) como el Tribunal Constitucional (TC) establecen que cuando una empresa o empresario adquiera una sociedad asume los actos cometidos formalmente en el pasado por dicha empresa en cuestión. Dicho de otro modo, cualquier tipo de deudas u otro tipo de obligaciones y responsabilidades tendrán que ser asumidas por el nuevo dueño de la empresa.

Sin embargo, hay algunos casos donde el Tribunal Constitucional (TC) puede depurar responsabilidades, por ejemplo, si llegado el caso se rompe la continuidad económica y empresarial de la empresa adquirida.

En el caso de que una empresa o una persona sola adquiera una sociedad limitada, es necesario realizar la pertinente declaración de unipersonalidad, y en su caso, inscribirla correctamente en el registro en un plazo máximo de seis meses desde su adquisición. Si este proceso no se realizase correctamente, el adquiriente de la empresa deberá responder a todas las deudas de la sociedad. Si se cumple este requisito, la responsabilidad se limita únicamente al precio de adquisición.

Como hemos dicho en el principio de este artículo, si tiene cualquier duda sobre la compra de una empresa España , no duden en contactar con nuestro bufete para tener un trato personalizado.

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